A veces siento un amor que me desborda y lo desborda todo. No puedo predecir cuándo ocurrirá y nada puede prepararme para ello y aunque a veces va ligado al amor romántico y éste me ayude a recordarlo, no siempre es así. Simplemente aparece en mí.
Y por algún motivo, aunque pueda parecer una especie de escapismo al contemplar todo aquello que nos rodea, tengo la impresión de que estoy atada a la realidad como si las mismas raíces del mundo fueran las mías propias.
En esos momentos todo es demasiado y no hay forma de poderlo contener, es como si yo desapareciera y sólo quedara esa riada de emoción. Y sólo puedo llorar y sentir felicidad. 




